No pienso traumatizarme por una arruguita en los labios y un par de canas!

Dedicado: a la alegría de mi huerta

“ El sitio te va a encantar, ya lo verás, porque allí va gente de TU EDAD...”

Aquel antro oscuro y lúgubre estaba lleno de gente mayor, por decirlo de una manera educada. Allí estábamos las tres, atónitas mirando alrededor...

“Oh Dios! ¿Me has confundido con una abuela de 80 años?! Exijo una explicación ahora mismo!” 

Hay que poner un poco de humor al asunto, porque ya imagino que no esperabas que nos encontráramos allí con todo el inserso. Fíjate que yo al salir pensaba que nos regalarían un jamón y una botella de aceite de 5 litros (por lo de las excursiones de pensionistas). 

¿Por qué mis amigas más jóvenes se encargan siempre de recordarme que yo ya no lo soy tanto?! No, no y no! Me niego a ceder! No pienso traumatizarme por una arruguita en los labios y un par de canas!